Quedan muy pocos días para decir adiós al año 2011 y dar la bienvenida al nuevo año que vá a comenzar 2012, por ello, os invito conmigo a que hagáis balance de las cosas positivas o negativas que os ha ocurrido durante este año que se nos va.
Algunos de vosotros habréis visto realizados vuestros proyectos, en cambio, a otros, se os habrán quedado en el camino, pero debemos pensar que no tenemos que desmoralizarnos por ello, porque aún queda todo un año 2012, por delante, para verlos cumplidos, por eso, también debemos ir pensando ya en los nuevos propósitos para el nuevo año que vá a comenzar.
En estos 365 días que he vivido, me he dado cuenta de que ha habido circunstancias de todos los colores y sabores, algunas, envueltas en satisfacción personal como cuando comencé el año con un trabajo, y momentos de felicidad con mi familia y amig@s, como vosotros, al haber compartido desde la cercanía, tertulias y reflexiones tan interesantes y entrañables.
También los ha habido menos agradables y con sabor amargo, como estos últimos meses al vivir la angustia e incertidumbre de la enfermedad de un familiar, o de saborear la crisis de cerca al no tener actualmente un trabajo, pero en general, el balance de este año para mí ha sido bastante positivo.
